Dia 11

Esta mañana la piscina continuaba verde fosforito, ayer vinieron a areglarla, el dueño dijo algo de iones o no sé qué.

Hoy tocaba visitar los pueblos de la lado del lago, hacía frio, paramos en Las Rozas, un pueblo donde sólo habír tres hombres preparando un escenario y toldos pra la fiesta mayor. 12,30 Misa, vermut, concursos de bolos. LAS ROZAS

Hize algunoso fotos, nos metimos por un camino que creíamos conducía al lago y no, había sólo dos casas al final, camino cortado. Sus dueños estaban haciendo obras, nos dijeron que la "torre pillada" se veía más adelante, muy cerca. Pero como ya sabemos como calculan las distancias la gente de los pueblos, pues vamos en coche.

En el inicio del camino hacia la torre, un letrero que parecía escrito por un merito merecantil, frio, no daba ninguna información y aburría. El camino se adentraba hacia el lago entre zarzas, parecía un sendero de playa, con arena muy fina y blanca. Y encontramos la torre, es lo único que queda de la iglesia cuando sumergieron el pueblo para hacer el pantano. Está bien, pero me hubiera gustado que en la indicación pusiera el nombre del pueblo, el de la iglesia... y no, sólo un letrero en el puente que une la orilla con la torre, explicando la clase de pajaros que hay por los alrededores. Mi Carmela, Francisco y Pepi subieron hasta arriba, mi padre quería hacerlo también, pero le convencí de que no. En el campanario había pintadas, algunas diciendo que allí habían sido bautizados.

LA "TORRE PILLADA"

Continuamos dando vueltas por los pueblos, paramos en uno porque a mi Pepi le picó la curiosidad por las quesadas que se anunciaba. pero... aparcamos delante de un ambulatorio y una señora asomada a la ventana vigilante nos dijo que no podíamso aparcar allí, (seguramente aguardaba el sitio para alguien.

Las quesadas estaban en una tienda Spar, estrecha y abarrotada, mi Pepi vió las quesadas, són como natillas de queso y no les gustaron.

Volvimos a casa y paramos en el Mercadona, que siempre es muy socorrido.

Comimos en casa, apurando ya los restos y por la tarde decidimos buscar las iglesias rupestres.

Mi padre se quedó en casa, descansando.

Salimos en dirección Población de Suso, pero como es natural, nos perdimos. Y por casualidad pasamos por Brañosera, donde se fundo el primer Ayuntamientos de España, en el año 842 creo.

Continuamos carretera arriba y abajo y encontramos la primera Iglesia rupestre, por casualidad fue la considerada catedral, la de Santa María de Valverde. Es como una pequeña ermita, encima la necropolis, huecos en la peidra donde estuvieron sepultados hombres, mujerers y niños... Al lado estaba el edificio de Interprestación, pero nos lo saltamos.

Y hacia la siguiente, la de Campoo de Ebro, vimos el letrero, pero la cueva no y pasamos sin verla, en la carretera vimos de largo la de Cadalso, está al borde la carretera, estaba cerrada, pero se veía un pequeño altara con flores y una imagen pequeña, de Nª. Sra. del Carmen.

IGLESIA RUPESTRE DE EL CADALSO.

No había ni un alma, y seguimos camino hasta Arroyelos. Ya habíamos estado ayer alli´, llegamos a unos diez metros y dimos la vuelta, ante la curiosidad de tres hombres setnados a la sombras. Esta vez continuamos y encontramos la iglesia. Estaba cerrada, nos asomamos a ella, y de repetne apareció un chico, del pueblo, debieron avisarle al vernos pasara. Sin decir ni pio, abrió la puerta, se hizo a un lado y nos dijo entre timido e indiferente si queríamos entrar. Lo hicimos y el chico había desaparecido, de repente oimos su voz desde las alturas.
La cueva era muy alta, tiene una gran columna en el centro, en un alto esta una especie de nicho donde dormía el ermitaño, había en un lado un tortuosa escalera que lelgaba hasta lo alto, pasando por un estrecho y corto túnel, desde allí nos hablaba. Nos invitó a subir, mi Pepi lo intentó, pero no pudo al ver el túnel, Francisco sí lo hizo.
El chico nos fue explicando, dijo que su hermano se había caido desde allí, jugando con él.
En esta no había nada religioso y parecía más auténtica. Podía inspirar muchas historias oscuras, fantasticas, misteriosas... A la salida fue la lltoería pra el guía. Mi Carmela le dio a mi Pepi un euro pra que se lo diera, mi pepi puso dos, Francisco le dió dos porque pensaba que no le había dado nadie y yo le di uno creyendo que sólo le había dado mi Pepi. Total 6 eruos por unos diez minutos.
Mi Pepi, al ver su contento le dijo que para nos quitara la mala famoa a los catalanes. El chico montó en su tabla y se alejó camino abajo.
Volvimos a la carretera y volvimos a perdernos, pero finalmente encotramos Reinosa.
El cielo se fue encapotando, pero sólo caía una lluvia fina o niebla, parecía que se iba a caer el cielo, pero al parecer aquí no descargan las tormentas, sólo se entretienen por las montañas.
Han venido a arreglar lal piscina, dicen que mañana nos podremos bañar, veremos.