Día 1
Nuestras vecinas okupas
Estamos mejorando, o quizás después de perdernos ¡en una gasolinera! Era demasiado difícil superar eso. Así que ¡No nos hemos perdido!
El viaje largo, claro… y con un despertar al grito de ¡gañan saca los mulos! ¿¡mande!? …de mi padre, nos hemos puesto en carretera:
(Bueeeeno…. No a la hora que pensábamos, mi Carmela se ha despertado a la hora que tenía que ir a buscarnos, pero bien.)
El viaje largo, claro… y con un despertar al grito de ¡gañan saca los mulos! ¿¡mande!? …de mi padre, nos hemos puesto en carretera:
(Bueeeeno…. No a la hora que pensábamos, mi Carmela se ha despertado a la hora que tenía que ir a buscarnos, pero bien.)
Durante el viaje no ha habido ningún contratiempo. Hemos comido en un área de servicio llamada Ven y Ven, pero mejor no ir si se es nervioso, pues los camareros van un tanto estresados. La comida estaba bien.
Y la casa es mejor que en la web. Aunque es un oasis, (separado por un tabique)en medio de un terreno más bien árido (bueno, seco en lenguaje normal).
La bañera/tinaja, es más grande de lo que parecía. Y tenemos unos vecinos… un potrillo y una familia de golondrinas en el porche.
Estábamos algo cansaditos, pero estrenamos la tinaja, estaba buenísima…. Y la tele tiene nieve.
La bañera/tinaja, es más grande de lo que parecía. Y tenemos unos vecinos… un potrillo y una familia de golondrinas en el porche.
Estábamos algo cansaditos, pero estrenamos la tinaja, estaba buenísima…. Y la tele tiene nieve.
Fuimos en plan de urgencia a comprar a un super pequeñito y vimos el pueblo, con río, paseo, gente en los bares a la sombra… en fin, lo típico.
Una calle de El robledo
Depósito de agua junto al pueblo.
Dia 2
Una calle de El robledo
Depósito de agua junto al pueblo.
Esta mañana como es domingo, quisimos hacer algo especial… en un principio iba a ir mi Pepi y Ángela a por churros, pero Ángela estaba hecha polvo y se ha despertado tarde, entonces Francisco dice de ir, yo que voy con él, mi Pepi que ella, que si coche, que si andando, total… hemos ido mi Pepi y yo, andando, hemos encontrado la churrería, comprado pan… y nos hemos perdidos… pero todo tiene una explicación. Estamos acostumbradas a calles cuadriculadas de Sabadell, hechas con tiralíneas, y aquí dan vueltas… ¡Total! Que a la vuelta hemos desayunado a las once, como vaticinaba Francisco!
Después hemos vagado y mi Pepi y Francisco han ido a hacer investigaciones culinarias al pueblo. Han vuelto diciendo ¡venga ya al pueblo a comer!
(Según mi Pepi cuando fueron a preguntar, la camarera, rumana ella, dio varios paseos al interior para preguntas qué había)
(Según mi Pepi cuando fueron a preguntar, la camarera, rumana ella, dio varios paseos al interior para preguntas qué había)
Y en el comedor, (estábamos solos), sale una “señora de su casa” con una agenda en la mano, diciendo qué había y nosotros: gazpachos do, y ella “bueno, voy a hacerlo y vengo a por lo demás” y así todo.
Hemos comido un poco rato, yo la primera vez que como huevos fritos y patatas en un restaurante. Una ensalada sin lechuga, (al preguntarle a la señora nos dijo que la haría con cosas de su huerto), sólo tenía tomate, pepino, cebolla y pimiento verde.
Total 70 €, pero ha salido caro.
Después piscina, siesta, charla, juego… en distinto orden.
Plaza de toros de Ciudad Real
En la oficina de turismo nos dieron información a granel, la chica muy agradable y servicial. Y ¡a buscar un Mercadona!. Fue fácil, preguntamos a una señora y después seguimos el rastro de las bolsas. Llenamos dos carros y a volver, pero…
Cuando ya salimos tranquilas y confiadas dirección Porzuna, mi Pepi se lleva las manos a la cara y lanza un suspiro de frustración. ¡se ha dejado los folletos de información de turismo en las taquillas de Mercadona! Así que vuelta atrás. Creíamos, creídas de nosotras, que en Ciudad Real sólo habría un Mercadona y ¡hay cuatro!. Preguntamos a unos obreros y nos indicaron el camino, se bajó mi Pepi, pero no era… el que fuimos nosotros estaba en la calle Real. Lo encontramos, preguntando claro.
Y volando hacia El Robledo, pensando que Francisco estaría ya hambriento y el yayo preocupado.
Después de comer y piscina, hemos salido a una de las excursiones recomendada, a Horcajo de los Montes.
La antesala de la Reserva de Cabañeros, es un pueblo en un hoyo que hace bonito El Robledo. Hemos dado una vuelta y aburridos nos hemos vuelto.
Y hemos tomado un refresquito en un merendero al lado del río Pitarque, muy agradable.
A la vuelta pasamos por la calle donde en una casa vendía melocotones, (antes habíamos pasado, pero había una letrero de que había ido a recoger melocotones) Francisco ha comprado dos kilos y también le ofrecieron tomates, pero en vacaciones Francisco queda saturado de tomates (se come el de todas las ensaladas, los suyos y el de todos). Y a casa.
Una cosilla, de pensamientos míos… cuando finalmente cogemos la carretera hacia Porzuna, tan contentas porque hemos acertado y no nos hemos perdido ni nada… voy yo pensando: “que bien, cuando llegamos a la casa, guardaremos lo que hemos comprado, comeremos y por la tarde planificaremos rutas con el montón de información que nos ha dado la chica de turismo… ¡AAAHHH! ¡¿Dónde están los folletos!?!? ¡En la taquilla del Mercadona! Ay, ay, ay, con los justitas que vamos de tiempo… Media vuelta, a ver si los encontramos… Preguntamos y sí, está aquí mismo. Me bajo y voy corriendo… Uy, esta no era la entrada. Me voy a ver la otra. Uy, tampoco. Pregunta: Hay alguna otra entrada? Responden: No! Pregunto: (con algo de preocupación) Hay más Mercadona. Responde: ¡Cuatro! Les cuento mi problema para que entiendan la expresión de mi cara. El Mercadona que busco dicen que está cerca, en la calle Real. Agacho las orejas y voy a compartir el tema con mis hermanas. No pasa nada: media vuelta con los huevos, los yogures, los 500 litros de leche, el melón, los melocotones (Siempre más melocotones),el pan, las magdalenas, las palomitas y las lechugas, las olivas, los garbanzos y la sopa, los picatostes y varios etc. etc. etc. Preguntamos, lo encontramos resolvemos y volvemos Uf!
Después del desencanto de mini—excursión de ayer a Horcajo, Carmela, Francisco, Mercedes y yayo han salido a investigar por los alrededores del Parque Nacional de Cabañeros. Van sobradamente preparados (llevan dos botellines de agua, je, je) Luego nos lo cuentan. (Dani también quería ir, pero no ha podido ser, tiene que descansar para que no se nos escahcarre).
El resto de criaturas nos quedamos en la casa barriendo, fregando los platos, limpiando el polvo, haciendo las camas, regando el césped, dándole de comer al caballo… y observando el nido de golondrinas básicamente. El plan es montar un poco en bici, recoger un poco la casa… ir al pueblo a tomar algo y planificar rutas (que ayer no hicimos ni elSeguimos… esta mañana había el plan de ir a la reserva de Cabañeros y hacia allí nos fuimos, al pasar por Santa Quiteria vimos un anuncio de quesos y ¡claro! Pensamos parar al volver.
Continuamos, el yayo hace un comentario de que no había cigüeñas justo cuando pasamos por un observatorio de ellas.
Llegamos a La Torre de Abraham, está bien, es una zona de pasarelas de madera sobre un cenagal, unos árboles que parecen secos, pero no, hay una explicación, el agua de color rojo es ferruginosa. Hemos llegado a una especie de merendero, pero no se veía bien la presa.
Y de nuevo a la carretera, hacia Pueblonuevo de Bullaque y Retuerta del Bullaque y finalmente Navas de Estena, un pueblo, según las guías en este pueblo se reunían en el 1300 las Hermandades de Toledo y Talavera para luchas contra el bandidaje, dieron origen a una institución la “Lliga de los Montes de Toledo” y Navas de Estena fue su primera sede. Pero… no queda nada, también hay muchos fósiles, pero… es un pueblo feo.
Fuimos a la Oficina de Turismo a por información, nos atendió una señora bastante bien, y que sabía. En la entrada había una tienda roja, medieval estilo Hollywood, y dos maniquís vestidos de pajes. Carmela, le dice, intentando ser amable, que tenían muy bien arreglado aquello, pero la señora le replica, que aquella tienda en aquella época no la tenían ni los más ricos, que entonces eran de madera de fresno.
Bueno, pues seguimos para hacer la ruta del Boquerón, hacía ya calor, aparcamos el coche, andamos unos metros, vuelve Francisco por el coche, subimos hasta el aparcamiento. Vuelta a andar, pero no era un paseo bonito y continuamente los comparábamos con los de Cataluña, cosa que no se debe hacer.
Nos volvimos, había un camino hacia una ermita y dijimos de subir para ver el paisaje, pero se terminó el asfalto y era todo cuesta arriba, así que cuando el camino se partían en dos volvimos.
Para dar la vuelta lo hizo Francisco, ante los gestos y advertencias de mi Carmela, después condujo él hasta la carretera, hasta Santa Quiteria. Es un pueblo bonito, con sus correspondientes nidos de cigüeña en la iglesia. Tomamos un refresco en un bar restaurante de cazadores, y compramos los quesos… Y no cobramos las bebidas. El yayo estaba muy cansado y no quería ni comer, yo me quedé con él y Carmela y Francisco se fueron a El Robledo, pero vinieron defraudados de la comida.
Y ahora estamos esperando para bañarnos.
Y vuelta, Francisco está algo pocho y se ha quedado en casa mientras el yayo y Carmela iba a por melocotones. Y el día ya se terminó.
Hay una luna gorda, gorda…
Hemos comido un poco rato, yo la primera vez que como huevos fritos y patatas en un restaurante. Una ensalada sin lechuga, (al preguntarle a la señora nos dijo que la haría con cosas de su huerto), sólo tenía tomate, pepino, cebolla y pimiento verde.
Total 70 €, pero ha salido caro.
Después piscina, siesta, charla, juego… en distinto orden.
Dia 3
Plaza de toros de Ciudad Real
Ayuntamiento de Ciudad Real
Hoy hemos ido Carmela, Pepi y yo a Ciudad Real, en busca de información para turistear. Aparcamos después e dar algunas vueltas, delante de la Plaza de Toros y a buscar el centro, fácil, un Ayuntamiento de arquitectura algo extraña, Xavi dice que le recuerda al castillo de Sauron de El Señor de los Anillos, la Of. de turismo cerrada, fuimos a buscar otra, pasamos por una plaza con la estatua del Quijote, normal.En la oficina de turismo nos dieron información a granel, la chica muy agradable y servicial. Y ¡a buscar un Mercadona!. Fue fácil, preguntamos a una señora y después seguimos el rastro de las bolsas. Llenamos dos carros y a volver, pero…
Cuando ya salimos tranquilas y confiadas dirección Porzuna, mi Pepi se lleva las manos a la cara y lanza un suspiro de frustración. ¡se ha dejado los folletos de información de turismo en las taquillas de Mercadona! Así que vuelta atrás. Creíamos, creídas de nosotras, que en Ciudad Real sólo habría un Mercadona y ¡hay cuatro!. Preguntamos a unos obreros y nos indicaron el camino, se bajó mi Pepi, pero no era… el que fuimos nosotros estaba en la calle Real. Lo encontramos, preguntando claro.
Y volando hacia El Robledo, pensando que Francisco estaría ya hambriento y el yayo preocupado.
Después de comer y piscina, hemos salido a una de las excursiones recomendada, a Horcajo de los Montes.
La antesala de la Reserva de Cabañeros, es un pueblo en un hoyo que hace bonito El Robledo. Hemos dado una vuelta y aburridos nos hemos vuelto.
Y hemos tomado un refresquito en un merendero al lado del río Pitarque, muy agradable.
A la vuelta pasamos por la calle donde en una casa vendía melocotones, (antes habíamos pasado, pero había una letrero de que había ido a recoger melocotones) Francisco ha comprado dos kilos y también le ofrecieron tomates, pero en vacaciones Francisco queda saturado de tomates (se come el de todas las ensaladas, los suyos y el de todos). Y a casa.
Una cosilla, de pensamientos míos… cuando finalmente cogemos la carretera hacia Porzuna, tan contentas porque hemos acertado y no nos hemos perdido ni nada… voy yo pensando: “que bien, cuando llegamos a la casa, guardaremos lo que hemos comprado, comeremos y por la tarde planificaremos rutas con el montón de información que nos ha dado la chica de turismo… ¡AAAHHH! ¡¿Dónde están los folletos!?!? ¡En la taquilla del Mercadona! Ay, ay, ay, con los justitas que vamos de tiempo… Media vuelta, a ver si los encontramos… Preguntamos y sí, está aquí mismo. Me bajo y voy corriendo… Uy, esta no era la entrada. Me voy a ver la otra. Uy, tampoco. Pregunta: Hay alguna otra entrada? Responden: No! Pregunto: (con algo de preocupación) Hay más Mercadona. Responde: ¡Cuatro! Les cuento mi problema para que entiendan la expresión de mi cara. El Mercadona que busco dicen que está cerca, en la calle Real. Agacho las orejas y voy a compartir el tema con mis hermanas. No pasa nada: media vuelta con los huevos, los yogures, los 500 litros de leche, el melón, los melocotones (Siempre más melocotones),el pan, las magdalenas, las palomitas y las lechugas, las olivas, los garbanzos y la sopa, los picatostes y varios etc. etc. etc. Preguntamos, lo encontramos resolvemos y volvemos Uf!
Dia 4Iglesia de Santa Quiteria
Después del desencanto de mini—excursión de ayer a Horcajo, Carmela, Francisco, Mercedes y yayo han salido a investigar por los alrededores del Parque Nacional de Cabañeros. Van sobradamente preparados (llevan dos botellines de agua, je, je) Luego nos lo cuentan. (Dani también quería ir, pero no ha podido ser, tiene que descansar para que no se nos escahcarre).
El resto de criaturas nos quedamos en la casa barriendo, fregando los platos, limpiando el polvo, haciendo las camas, regando el césped, dándole de comer al caballo… y observando el nido de golondrinas básicamente. El plan es montar un poco en bici, recoger un poco la casa… ir al pueblo a tomar algo y planificar rutas (que ayer no hicimos ni elSeguimos… esta mañana había el plan de ir a la reserva de Cabañeros y hacia allí nos fuimos, al pasar por Santa Quiteria vimos un anuncio de quesos y ¡claro! Pensamos parar al volver.
Continuamos, el yayo hace un comentario de que no había cigüeñas justo cuando pasamos por un observatorio de ellas.
Llegamos a La Torre de Abraham, está bien, es una zona de pasarelas de madera sobre un cenagal, unos árboles que parecen secos, pero no, hay una explicación, el agua de color rojo es ferruginosa. Hemos llegado a una especie de merendero, pero no se veía bien la presa.
Y de nuevo a la carretera, hacia Pueblonuevo de Bullaque y Retuerta del Bullaque y finalmente Navas de Estena, un pueblo, según las guías en este pueblo se reunían en el 1300 las Hermandades de Toledo y Talavera para luchas contra el bandidaje, dieron origen a una institución la “Lliga de los Montes de Toledo” y Navas de Estena fue su primera sede. Pero… no queda nada, también hay muchos fósiles, pero… es un pueblo feo.
Fuimos a la Oficina de Turismo a por información, nos atendió una señora bastante bien, y que sabía. En la entrada había una tienda roja, medieval estilo Hollywood, y dos maniquís vestidos de pajes. Carmela, le dice, intentando ser amable, que tenían muy bien arreglado aquello, pero la señora le replica, que aquella tienda en aquella época no la tenían ni los más ricos, que entonces eran de madera de fresno.
Bueno, pues seguimos para hacer la ruta del Boquerón, hacía ya calor, aparcamos el coche, andamos unos metros, vuelve Francisco por el coche, subimos hasta el aparcamiento. Vuelta a andar, pero no era un paseo bonito y continuamente los comparábamos con los de Cataluña, cosa que no se debe hacer.
Nos volvimos, había un camino hacia una ermita y dijimos de subir para ver el paisaje, pero se terminó el asfalto y era todo cuesta arriba, así que cuando el camino se partían en dos volvimos.
Para dar la vuelta lo hizo Francisco, ante los gestos y advertencias de mi Carmela, después condujo él hasta la carretera, hasta Santa Quiteria. Es un pueblo bonito, con sus correspondientes nidos de cigüeña en la iglesia. Tomamos un refresco en un bar restaurante de cazadores, y compramos los quesos… Y no cobramos las bebidas. El yayo estaba muy cansado y no quería ni comer, yo me quedé con él y Carmela y Francisco se fueron a El Robledo, pero vinieron defraudados de la comida.
Y ahora estamos esperando para bañarnos.
Dia 5
Mesón Hospedería Luciano (Malagón)
Esta mañana tocaba descanso y descanso hemos tenido, la tercera parte. Francisco, Carmela y Pepi a hacer una incursión culinaria. Y se han dado una vuelta (tendrá que explicarla alguno de ellos) los demás nos hemos quedado en casa, leyendo, o enganchados a la plays y demás.
Después nos hemos ido a comer a Porzuna, Francisco se ha quedado pues estaba algo empachado.
Esta mañana tocaba descanso y descanso hemos tenido, la tercera parte. Francisco, Carmela y Pepi a hacer una incursión culinaria. Y se han dado una vuelta (tendrá que explicarla alguno de ellos) los demás nos hemos quedado en casa, leyendo, o enganchados a la plays y demás.
Después nos hemos ido a comer a Porzuna, Francisco se ha quedado pues estaba algo empachado.
En Porzuna hemos comido en El Mesón El Malagueño. Muy bien, raciones grandes y buena atención, pero mi Carmela no sé que le ha pasado, cuando salgo ya no está, ha ido a buscar el coche para poner gasolina, vuelve, recoge a Ángela, se van, vuelve, nos recogen… en fin.
Por la tarde piscina y Pepi, Ángela, Xavi y yo fuimos a Porzuna a un Cyber, que era un locutorio—video—club, mientras ellos interneaban nosotras nos fuimos a dar una vuelta por el pueblo. Es más grande, como una ciudad pequeña.
Por la tarde piscina y Pepi, Ángela, Xavi y yo fuimos a Porzuna a un Cyber, que era un locutorio—video—club, mientras ellos interneaban nosotras nos fuimos a dar una vuelta por el pueblo. Es más grande, como una ciudad pequeña.
Y vuelta, Francisco está algo pocho y se ha quedado en casa mientras el yayo y Carmela iba a por melocotones. Y el día ya se terminó.
Hay una luna gorda, gorda…
Por la mañana, después de investigar donde comer en Porzuna, como íbamos bien de tiempo, hemos ido a Malagón, a ver como pintaba, y bueno: grande, no nos quedamos mucho rato, lo justo para descubrir el Mesón Hospedería Luciano, de la ruta del Quijote. Guapo, guapo. Nos ha gustado mucho, fresquito, muy manchego.
Para regresar pasamos por Fernán Caballero y el embalse de Garret, hay que decirlo: nos hemos perdido un poquitín, chiquitín.
Dia 6
Para regresar pasamos por Fernán Caballero y el embalse de Garret, hay que decirlo: nos hemos perdido un poquitín, chiquitín.
Dia 6
Museo Cervantino (Ciudad Real)
Carrillón de Cervantes, Don Quijote y Sancho.
¡Por fin! ¡Una excursión todos juntos a Ciudad del Xavi!
Salimos temprano, sin contratiempos, y llegamos sin perdernos. Visitamos la plaza del Ayuntamiento y el Museo Cervantino, está bien, pero podía estar mejor. Es todo muy sencillo, las guías ponían las diapositivas y desaparecían.
Y como siempre, pensando que se podría mejorar. Una edición de todos los idiomas en que se ha hecho… láminas de hueco grabado, figuras… ¡en fin!Hemos visto también un carillón con las figuras de Cervantes, Sancho y el Quijote.
¡Por fin! ¡Una excursión todos juntos a Ciudad del Xavi!
Salimos temprano, sin contratiempos, y llegamos sin perdernos. Visitamos la plaza del Ayuntamiento y el Museo Cervantino, está bien, pero podía estar mejor. Es todo muy sencillo, las guías ponían las diapositivas y desaparecían.
Y como siempre, pensando que se podría mejorar. Una edición de todos los idiomas en que se ha hecho… láminas de hueco grabado, figuras… ¡en fin!Hemos visto también un carillón con las figuras de Cervantes, Sancho y el Quijote.
Y vuelta, pues era temprano para comer. Entonces decidimos ir a Santa Quiteria, llegamos, preguntamos y volvimos, pues era el día de descanso del personal.
Entonces vamos a Alcoba, paramos en el primer restaurante y al fin único. Preguntamos y el del bar nos dice ¡Yo qué sé, eso es cosa de mujeres! Total, esperamos hasta las dos y comimos, no ha estado mal, pero bueno, era de emergencia.
Y a la piscina y comer para cenar el queso bueno de Cabañeros.
Entonces vamos a Alcoba, paramos en el primer restaurante y al fin único. Preguntamos y el del bar nos dice ¡Yo qué sé, eso es cosa de mujeres! Total, esperamos hasta las dos y comimos, no ha estado mal, pero bueno, era de emergencia.
Y a la piscina y comer para cenar el queso bueno de Cabañeros.
¡Ah! Ha llamado Miguel, primero diciendo que se había roto un pie, pero era broma y no la ha mantenido ante el tono de alarma de Carmela. Era para preguntar como se ponía el DVD porque no ¡¿podían?! Ver la película.
Y ya está, ahora estamos de tertulia, después de jugar, bajo la risa de Xavi al Piou—Piou con mi Pepi, y el papa contando sus batallitas de nostalgia.
Y ya está, ahora estamos de tertulia, después de jugar, bajo la risa de Xavi al Piou—Piou con mi Pepi, y el papa contando sus batallitas de nostalgia.
Día 7.
Esta mañana Carmela y Francisco han sido los encargados de comprar churros y perrunillas, las famosas galletas que tenía que traernos la dueña de la casa, pero…
Después de desayunar hemos ido al mercadillo, en un principio las tres hermanas, Francisco y Dani, pero Francisco, para solidarizarse con Dani, le duele una pierna y a mitad de camino se ha vuelto, para desconcierto de Dani, que no podía elegir con quien irse. Al final le ha elegido a él, claro.
Y nos hemos ido al mercadillo con varios objetivos:
1—Comprar unas chancletas.
2—Y comprar unos calzoncillos para Xavi. Porque a los cinco días de estar aquí se ha dado cuenta mi Pepi de que se había olvidado traerlos. (Ha tenido puesto siempre el bañador)
Dimos una vuelta por el mercadillo y compramos “los vestidos de verano”. Y no nos perdimos por el pueblo, teníamos de guía a mi Carmela, y por mala suerte, sólo ella perdió pie.
Después comida en casa, siesta, piscina, comida…
Dia 8
Molinos en el Campo de Criptana
Excursión larga. A Campo de Criptana, a ver molinos. Paramos en Villarrubia de los Ojos, es bonito, y a los molinos. Pero… los vimos, pero, en la oficina de turismo nos dijeron que dicha oficina estaba en otro sitio. (había una oficina sólo para decir esto). Visitamos un molino (el yayo se enfadó mucho, estaba cansado y el aire era seco como el esparto y el ambiente también).
Vimos también una cueva, ¡puach! Blanqueada sin cuidado, con salpicaduras de cal los utensilios que presumiblemente eran los cotidianos de la gente que vivía en ella.
Lo más interesante la tienda de recuerdos.
Y hacia el Mirador de la Mancha. Se ve… toda la llanura, pero da algo de grima. Daimiel a lo lejos, al parecer con poco agua. Hemos intentado comer en el restaurante del mirador, pero era muy caro y con una rampa que para subirla el yayo no hubiera podido.
Y bajamos hacia Villarrubia a comer. Ha estado bien… y para casa cruzando en línea recta, con alguna leve curva, la inmensa llanura manchega. (Qué digo yo que se dirá mancha por ser como eso en medio de la Península).
Por la tarde piscina, (el agua estaba bastante sucia).
La dueña de la casa está acumulando faltas.
1—No nos ha traído todavía sus famosas perrunillas.
2— Las bicicletas no tienen marcha.
3— No nos lava la ropa, según ella: “no… como está la lavadora”.
4—No viene a limpiar la piscina.
Cosas sueltas.
—Xavi alucina al oír su propia voz en la grabación de video.
—Me he comprado El Quijote, con vida de Cervantes incluida, Xavi dos espaditas, Mercedes y Carmela Molino, Quijote, espadita para Miguel…
—Ángela se achicharra el brazo izquierdo bajo el sol en la supermegalarga hiperrectainfernal de la llanura manchega.
—Ángela enseña a Xavi a hacer un mini programa en el PC donde aparece un mensaje diciendo que soy tonta.
Esta mañana Carmela y Francisco han sido los encargados de comprar churros y perrunillas, las famosas galletas que tenía que traernos la dueña de la casa, pero…
Después de desayunar hemos ido al mercadillo, en un principio las tres hermanas, Francisco y Dani, pero Francisco, para solidarizarse con Dani, le duele una pierna y a mitad de camino se ha vuelto, para desconcierto de Dani, que no podía elegir con quien irse. Al final le ha elegido a él, claro.
Y nos hemos ido al mercadillo con varios objetivos:
1—Comprar unas chancletas.
2—Y comprar unos calzoncillos para Xavi. Porque a los cinco días de estar aquí se ha dado cuenta mi Pepi de que se había olvidado traerlos. (Ha tenido puesto siempre el bañador)
Dimos una vuelta por el mercadillo y compramos “los vestidos de verano”. Y no nos perdimos por el pueblo, teníamos de guía a mi Carmela, y por mala suerte, sólo ella perdió pie.
Después comida en casa, siesta, piscina, comida…
Dia 8
Villarrubia de los Ojos.
Molinos en el Campo de Criptana
Vimos también una cueva, ¡puach! Blanqueada sin cuidado, con salpicaduras de cal los utensilios que presumiblemente eran los cotidianos de la gente que vivía en ella.
Lo más interesante la tienda de recuerdos.
Y hacia el Mirador de la Mancha. Se ve… toda la llanura, pero da algo de grima. Daimiel a lo lejos, al parecer con poco agua. Hemos intentado comer en el restaurante del mirador, pero era muy caro y con una rampa que para subirla el yayo no hubiera podido.
Y bajamos hacia Villarrubia a comer. Ha estado bien… y para casa cruzando en línea recta, con alguna leve curva, la inmensa llanura manchega. (Qué digo yo que se dirá mancha por ser como eso en medio de la Península).
Por la tarde piscina, (el agua estaba bastante sucia).
La dueña de la casa está acumulando faltas.
1—No nos ha traído todavía sus famosas perrunillas.
2— Las bicicletas no tienen marcha.
3— No nos lava la ropa, según ella: “no… como está la lavadora”.
4—No viene a limpiar la piscina.
Cosas sueltas.
—Xavi alucina al oír su propia voz en la grabación de video.
—Me he comprado El Quijote, con vida de Cervantes incluida, Xavi dos espaditas, Mercedes y Carmela Molino, Quijote, espadita para Miguel…
—Ángela se achicharra el brazo izquierdo bajo el sol en la supermegalarga hiperrectainfernal de la llanura manchega.
—Ángela enseña a Xavi a hacer un mini programa en el PC donde aparece un mensaje diciendo que soy tonta.
Día 9.
Pero bueno, no ha sido por guarro, ¡si todos los días se metía en la piscina!
Y a lo que iba, hoy tocaba descanso, pero mi Carmela se ha despertado con ganar de conducir y nos ha llevado a Francisco y a mí a Toledo, hora y media de ida, igual de vuelta, igual de visita. Corre, corre, corre…
La ciudad está bien, merece una visita tranquila, recreándose en todos los rincones, entrando a curiosear en las tiendas… ¡En fin! Una semana como mínimo. Será un proyecto de futuro.
Después hemos comido, sólo los adultos, en La Verbena, otro bar el El Robledo. Hemos comido bien, mi Pepi ha probado el filete de venado, está bueno.
Y ha entrado Mª Mar en el restaurante, la dueña de la casa, según mi Carmela se ha escondido de nosotros.
Por la tarde hemos jugado al dominó y mi Carmela (no sé como) ha ganado dos veces, mi Pepi otra (eran pareja) y Francisco llega a dudar de si hacen trampas. Y se ha sentido herido en su orgullo de jugador, y ha ganado, claro, entonces ellas, ¡las muy cobardes!, se han retirado.
Y en ese momento ha venido la dueña de la casa con la ropa de cama y toallas.
Está mañana, después de comer ha venido con las ¡¡¡perrunillas!!! y bizcochos, imagino que esto último como compensación.
¡Ah! Y ha traído la marcha, y va a limpiar la piscina ¡Veremos!
Toledo
XAVI SE HA DUCHADO!¡BIEEEN!Pero bueno, no ha sido por guarro, ¡si todos los días se metía en la piscina!
Y a lo que iba, hoy tocaba descanso, pero mi Carmela se ha despertado con ganar de conducir y nos ha llevado a Francisco y a mí a Toledo, hora y media de ida, igual de vuelta, igual de visita. Corre, corre, corre…
La ciudad está bien, merece una visita tranquila, recreándose en todos los rincones, entrando a curiosear en las tiendas… ¡En fin! Una semana como mínimo. Será un proyecto de futuro.
Después hemos comido, sólo los adultos, en La Verbena, otro bar el El Robledo. Hemos comido bien, mi Pepi ha probado el filete de venado, está bueno.
Y ha entrado Mª Mar en el restaurante, la dueña de la casa, según mi Carmela se ha escondido de nosotros.
Por la tarde hemos jugado al dominó y mi Carmela (no sé como) ha ganado dos veces, mi Pepi otra (eran pareja) y Francisco llega a dudar de si hacen trampas. Y se ha sentido herido en su orgullo de jugador, y ha ganado, claro, entonces ellas, ¡las muy cobardes!, se han retirado.
Y en ese momento ha venido la dueña de la casa con la ropa de cama y toallas.
Está mañana, después de comer ha venido con las ¡¡¡perrunillas!!! y bizcochos, imagino que esto último como compensación.
¡Ah! Y ha traído la marcha, y va a limpiar la piscina ¡Veremos!
Día 10.
Quisimos ir esta mañana a visitar Malagón. Pepi, Carmela y Francisco ya lo habían visitado y les gustó una venta donde tomaron un refresco, pero estaba cerrada. Así que paseamos por su calle Tercia y tomamos un vermut y hacia casa.
Para comer hemos ido a Santa Quiteria, el restaurante El Cazador, está bien, pero las comidas de estos restaurantes son muy sustanciosas para nosotros, más acostumbrados o a cosas a la plancha y fritos. Los niños y yo platos combinados.
Y vuelta a casa. Por la tarde han venido a cortar el césped y limpiar la piscina y después… se ha caído el cielo. Tormenta de viento, relámpagos y lluvia un buen rato. Carmela, Pepi y Francisco se han bañado a corre vuela, a mi la indecisión me ha parado y ya no me ha dado tiempo, antes de que empezara la tormenta.
Dia 11
Tablas de Daimiel
Olivo milenario en el pueblo de Daimiel
Esta mañana mi Carmela, Francisco y Pepi se han ido a Daimiel (ellos contaran) Yo me he quedado, he dado un paseo con el yayo, me ha bañado. La piscina para mi sola.
Después de comer nos hemos ido las hermanas a Ciudad Real, hemos paseado, me he comprado una chaqueta, pendientes de regalo del yayo, hemos tomado helado… y vuelta.
Y ha caído otra vez una tormenta de viento y agua, nos ha pillado al entrar en El Robledo, ya estaba el yayo preocupado, ha sido con más viento que ayer. Han volado las sillas, un macetón, ha entrado en el porche… y al parecer ha hecho a la agricultura de la comarca y ha inundado algunos pueblos.
Daimiel. Hemos ido a primera hora (tal y como aconsejan los catálogos) y nos han explicado que el Parque no es lo que era debido a la sobreexplotación del agua subterránea (el Guadiana ya no llega a la superficie) Todo sequito, sequito, la ruta amarilla a la Isla del Pan (200 mt.) es la única que tenía agua y que da una idea de lo que eran las tablas. Tuvo que ser una preciosidad. Por eso mismo da un poco de pena imaginar que serían ahora.
Después hemos ido a Daimiel a hacer un segundo desayuno a base de buenos churros y luego unos refresquitos en la plaza Mayor, junto al olivo milenario (1000enario!)
Quisimos ir esta mañana a visitar Malagón. Pepi, Carmela y Francisco ya lo habían visitado y les gustó una venta donde tomaron un refresco, pero estaba cerrada. Así que paseamos por su calle Tercia y tomamos un vermut y hacia casa.
Para comer hemos ido a Santa Quiteria, el restaurante El Cazador, está bien, pero las comidas de estos restaurantes son muy sustanciosas para nosotros, más acostumbrados o a cosas a la plancha y fritos. Los niños y yo platos combinados.
Y vuelta a casa. Por la tarde han venido a cortar el césped y limpiar la piscina y después… se ha caído el cielo. Tormenta de viento, relámpagos y lluvia un buen rato. Carmela, Pepi y Francisco se han bañado a corre vuela, a mi la indecisión me ha parado y ya no me ha dado tiempo, antes de que empezara la tormenta.
Dia 11
Tablas de Daimiel
Olivo milenario en el pueblo de Daimiel
Esta mañana mi Carmela, Francisco y Pepi se han ido a Daimiel (ellos contaran) Yo me he quedado, he dado un paseo con el yayo, me ha bañado. La piscina para mi sola.
Después de comer nos hemos ido las hermanas a Ciudad Real, hemos paseado, me he comprado una chaqueta, pendientes de regalo del yayo, hemos tomado helado… y vuelta.
Y ha caído otra vez una tormenta de viento y agua, nos ha pillado al entrar en El Robledo, ya estaba el yayo preocupado, ha sido con más viento que ayer. Han volado las sillas, un macetón, ha entrado en el porche… y al parecer ha hecho a la agricultura de la comarca y ha inundado algunos pueblos.
Daimiel. Hemos ido a primera hora (tal y como aconsejan los catálogos) y nos han explicado que el Parque no es lo que era debido a la sobreexplotación del agua subterránea (el Guadiana ya no llega a la superficie) Todo sequito, sequito, la ruta amarilla a la Isla del Pan (200 mt.) es la única que tenía agua y que da una idea de lo que eran las tablas. Tuvo que ser una preciosidad. Por eso mismo da un poco de pena imaginar que serían ahora.
Después hemos ido a Daimiel a hacer un segundo desayuno a base de buenos churros y luego unos refresquitos en la plaza Mayor, junto al olivo milenario (1000enario!)
Día 12.
Villanueva de los Infantes
Hoy dos casualidades. Hemos ido a Valdepeñas, paseaba con mi padre y le dio que me recuerda a Antequera, me giro a mirar una calleja y leo: Muebles Antequera.
Después, en las Bodegas Real, había unas personas y cuando ya nos despedían dicen a Francisco ¿Eres de Barberá? Ellos lo eran, conocían a Francisco de vista.
Valdepeñas es bonito, una plaza Mayor pequeñita, con casas pintadas de blanco y con cenefa añil, una iglesia, bares con barricas de vino sirviendo de mesa… tomamos un desayuno con churros y hacia la Bodega Real. Es una bodega pequeña, pero muy bien equipada, no era día de visita, tenían que ser en horas programas, pero en atención al yayo la guía nos atendió, muy amable. (El yayo había estado allí cuando la guerra y se empeñaba en localizar las viñas donde estuvo, ¡al cabo de setenta años!)
Plaza Mayor de Valdepeñas
Bodegas Real
Villanueva de los Infantes
Hoy dos casualidades. Hemos ido a Valdepeñas, paseaba con mi padre y le dio que me recuerda a Antequera, me giro a mirar una calleja y leo: Muebles Antequera.
Después, en las Bodegas Real, había unas personas y cuando ya nos despedían dicen a Francisco ¿Eres de Barberá? Ellos lo eran, conocían a Francisco de vista.
Valdepeñas es bonito, una plaza Mayor pequeñita, con casas pintadas de blanco y con cenefa añil, una iglesia, bares con barricas de vino sirviendo de mesa… tomamos un desayuno con churros y hacia la Bodega Real. Es una bodega pequeña, pero muy bien equipada, no era día de visita, tenían que ser en horas programas, pero en atención al yayo la guía nos atendió, muy amable. (El yayo había estado allí cuando la guerra y se empeñaba en localizar las viñas donde estuvo, ¡al cabo de setenta años!)
La guía nos explicó el proceso de la elaboración del vino e hicimos una cata, simpática, Xavi tiene buena nariz y ha sido muy agradable la prueba.
Después hemos ido a comer a Villanueva de los Infantes, es una ciudad bonita, monumental, lo único malo ha sido la comida, quizás por no nadar demasiado buscando restaurantes.
Y vuelta.
Esta noche hay La Esperidas, o corrimiento de estrellas.
Nos fuimos al patio, equipados con toallas, sillas… pero no vimos muchas, al menos yo, sólo vi o creí ver una.
Día 13
Lagunas de Ruidera
Después hemos ido a comer a Villanueva de los Infantes, es una ciudad bonita, monumental, lo único malo ha sido la comida, quizás por no nadar demasiado buscando restaurantes.
Y vuelta.
Esta noche hay La Esperidas, o corrimiento de estrellas.
Nos fuimos al patio, equipados con toallas, sillas… pero no vimos muchas, al menos yo, sólo vi o creí ver una.
Día 13
Lagunas de Ruidera
Argamasilla de Alba
Ángela, Xavi, yayo, Dani y yo no hemos quedado en la casa mientras Carmela, Francisco y Mercedes iban de excursión a ver las lagunas de Ruidera. (o las sonoras, como dice Carmela)
Anoche no se durmió en El Robledo. Actuaba ala orquesta Esmeralda, de éxito garantizado.
Me he levantado para despedir a los excursionistas, preparar desayunos y administrar pastillas. Luego, al catre dos horitas güenas, güenas.
Ángela, Xavi, yayo, Dani y yo no hemos quedado en la casa mientras Carmela, Francisco y Mercedes iban de excursión a ver las lagunas de Ruidera. (o las sonoras, como dice Carmela)
Anoche no se durmió en El Robledo. Actuaba ala orquesta Esmeralda, de éxito garantizado.
Me he levantado para despedir a los excursionistas, preparar desayunos y administrar pastillas. Luego, al catre dos horitas güenas, güenas.
Cuando me despierto veo a yayo arreglado y con el bastón. Capto el mensaje y me ducho, me maqueo, y a la plaza, que son las fiestas del pueblo. Paseamos por el pueblo y después de preguntas (sólo dos veces) llegamos a la plaza del Ayuntamiento (es la Plaza de la Virgen del Prado) y allí está El Parrita, con su teclado en un tablao, cantando y tocando canciones de ayer, hoy y siempre, saludando a la gente por el micro entre tonada y tonada. Estamos el yayo y yo en un banquito y toca para nosotros solos hasta que llegan unos chiquillos en bañador; nos tomamos unos botellines de San Miguel y nos regalan unas patatas. Entre la iglesia y la plaza han puesto una especie de aspersores de calle a calle, que riegan a todo el que pasa.
El yayo está contento, tarareando las canciones y siguiendo el ritmo con el bastón y los pies. El aire nos trae gotitas fresquitas del agua que riega la calle; la gente que pasa nos saluda y los chicos se pasean con la bici bajo la lluvia preparada.
De regreso a casa pasamos por la feria para verla y nos para un coche. Son Mar y su marido. Muy amables, nos acercan en su coche (prácticamente su marido sube al ayazo en volandas, es un coche alto) Muy atentos con el yayo durante el trayecto. Un encanto. Una vez en casa XAVI NOS PREPARA EL VERMUT (olivas verdes y negras, quesitos manchegos del bueno, fuet) Sube de nivel. El yayo nos cuenta cositas de su niñez.
Las Lagunas de Ruidera es un río que baja por unos escalones y va formando lagunas, como vasos que se comunican y uno vierte el agua en el siguiente una vez llegan al borde.
Entre laguna y laguna hay una especia de piedra que se llama toba, está cortado el camino para pasar por ella, pues de pisar mucho se destroza y sólo hay dos lugares en el mundo, el otro es Croacia.
Había mucha gente, parecía Sitges en pleno verano. Después hemos ido a Argamasilla de Alba, según parece aquí estuvo preso Cervantes, pero es un pueblo que me ha dado mala impresión, hemos tomado un vermut en el pueblo y comido en un restaurante en la entrada (o salida) del pueblo, muy normalito.
Y tormenta otra vez.
El yayo está contento, tarareando las canciones y siguiendo el ritmo con el bastón y los pies. El aire nos trae gotitas fresquitas del agua que riega la calle; la gente que pasa nos saluda y los chicos se pasean con la bici bajo la lluvia preparada.
De regreso a casa pasamos por la feria para verla y nos para un coche. Son Mar y su marido. Muy amables, nos acercan en su coche (prácticamente su marido sube al ayazo en volandas, es un coche alto) Muy atentos con el yayo durante el trayecto. Un encanto. Una vez en casa XAVI NOS PREPARA EL VERMUT (olivas verdes y negras, quesitos manchegos del bueno, fuet) Sube de nivel. El yayo nos cuenta cositas de su niñez.
Las Lagunas de Ruidera es un río que baja por unos escalones y va formando lagunas, como vasos que se comunican y uno vierte el agua en el siguiente una vez llegan al borde.
Entre laguna y laguna hay una especia de piedra que se llama toba, está cortado el camino para pasar por ella, pues de pisar mucho se destroza y sólo hay dos lugares en el mundo, el otro es Croacia.
Había mucha gente, parecía Sitges en pleno verano. Después hemos ido a Argamasilla de Alba, según parece aquí estuvo preso Cervantes, pero es un pueblo que me ha dado mala impresión, hemos tomado un vermut en el pueblo y comido en un restaurante en la entrada (o salida) del pueblo, muy normalito.
Y tormenta otra vez.
Día 14.
Plaza Mayor de Almagro
Corral de Comedias
Hoy hemos ido a Almagro, sólo los adultos. Es bonita, para pasear lentamente por sus calles. Desayuno en la Plaza Mayor, pero primero había que buscar la churrería o una cafetería que los hicieran. Así que preguntando a los del lugar nos mandaron al mercado municipal. Churros redondos, buenos, después esperar eternamente el café. Había un camarero de “yo lo hago yo lo sirvo, yo lo cobro” Y después al Corral de Comedias, como en las fotos, ha sido interesante, no era difícil imaginarse a los Mosqueteros, a Lope de Vega, a Cervantes, pululando por aquellos pasillos.
Visitamos también el Museo del Teatro, con los trajes de algunas obras, con los trucos para el viento, el mar… y corriendo, corriendo de vuelta a casa para comer en El Mesón El Malagueño de Porzuna… y a casa, piscina, tele…
Y la fiesta sigue sonando todas las noches, pero hay pocas ganas de ir.
Plaza Mayor de Almagro
Corral de Comedias
Visitamos también el Museo del Teatro, con los trajes de algunas obras, con los trucos para el viento, el mar… y corriendo, corriendo de vuelta a casa para comer en El Mesón El Malagueño de Porzuna… y a casa, piscina, tele…
Y la fiesta sigue sonando todas las noches, pero hay pocas ganas de ir.
Día 15.
Descanso, descanso y hacia las dos volando hacia Santa Quiteria para comer, había más gente, pero se come bien.
Después había que poner gasolina, pero aquí no es tan fácil. En Porzuna, cerrada, en El Robledo también, y la dueña de la casa no ha mandado a El Torno, El To no, según los letreros. Allí estaba abierta, la mujer de la gasolinera nos ha regalado una bolsa de fantasmitas.
Después hacer maletas, recoger las cosas… con el ánimo ya disgustado por la vuelta. Hemos pagado el resto de la casa, nos despedimos de los dueños y nos dejamos en el almario las cosas que pensábamos decirle. ¡Para qué, si no vamos más a volver!
Descanso, descanso y hacia las dos volando hacia Santa Quiteria para comer, había más gente, pero se come bien.
Después había que poner gasolina, pero aquí no es tan fácil. En Porzuna, cerrada, en El Robledo también, y la dueña de la casa no ha mandado a El Torno, El To no, según los letreros. Allí estaba abierta, la mujer de la gasolinera nos ha regalado una bolsa de fantasmitas.
Después hacer maletas, recoger las cosas… con el ánimo ya disgustado por la vuelta. Hemos pagado el resto de la casa, nos despedimos de los dueños y nos dejamos en el almario las cosas que pensábamos decirle. ¡Para qué, si no vamos más a volver!
Día 16.
Vuelta a casa. El camino se hizo rápido, para comer, pasando y buscando restaurante casi comemos en casa. Lo hicimos en un área de servicio de la autopista, abarrotada de gente, calor, y ya cansados de tanta carretera. Y con gesto hosco por el termino de las vacaciones y la vuelta a la rutina.
FIN
Vuelta a casa. El camino se hizo rápido, para comer, pasando y buscando restaurante casi comemos en casa. Lo hicimos en un área de servicio de la autopista, abarrotada de gente, calor, y ya cansados de tanta carretera. Y con gesto hosco por el termino de las vacaciones y la vuelta a la rutina.
FIN
1 comentario:
Que casualidad jeje, nosotros somos de castellar del valles, y tenemos una casa en el robledo.
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